El Raja Yoga ( yoga Real o yoga de la Mente) igual que el Agni Yoga (yoga de Fuego) es parte de las técnicas meditativas milenarias de la Tradición Inmemorial Transhimaláica.
En los talleres y cursos de este blog se establece una diferenciación basada en la propia experiencia de ambas disciplinas tratando de acercar a todos los credos y ambientes socio-culturales los beneficios de ambos tipos de yoga.
El Raja Yoga, el entreno y domino de la mente como herramienta fundamental para el bienestar y el crecimiento positivo del ser humano se diferencia del Agni Yoga (aunque para realizar el segundo es indispensable haber adquirido el suficiente control mental a través del Raja) en su vertiente espiritual.
La positividad, el bienestar y el éxito en la vida no está ligado al misticismo de ningún tipo de credo, ni a una tendencia espiritual determinada, aunque en el trabajo con el Agni Yoga, utilizamos parte de las «creencias» de cada meditador como símbolos que nos permiten «personificar» determinado tipo de energías, patrones o tendencias de nuestra mente y emociones.
A través del Raja Yoga adquirimos la capacidad de recuperar el control sobre los pensamientos y la influencia que éstos tienen en nuestra percpeción sobre la vida.
Desarrollamos las funciones cerebrales buscando el equilibrio entre ambos hemisferios dotándonos así de una potencial creatividad a la mente común, lógica o razonadora que está infinitamente desproporcionada con su hemisferio homólogo.
Descubrimos una inmensa capacidad desconocida de la mente como «agente» creador de bienestar y éxito, a medida que simplificamos sus procesos de pensamiento hasta un punto cero capaz de reiniciarse en novedosos y exponenciales movimientos creativos, dirigidos a la evolución personal y a la consecución de metas.
El trabajo con el Raja Yoga nos convierte en libre pensadores capaces de acceder a un basto mundo de realización individual y material, ofreciéndonos posibilidades enormes de prosperar en todos los ámbitos de la vida
El Agni Yoga (siempre que esta sea nuestra via) nos abre las puertas a realidades invisibles. Desarrolla el potencial psicológico dotando al cerebro de puntos sensoriales capaces de acceder a procesos psíquicos poco ortodoxos.
El mundo descrito por muchos místicos y meditadores se abre en un infinito abanico de caminos, así como la posibilidad de telepatía, de intuición y de conexión con dimensiones y realidades fuera del espacio-tiempo de la tierra.
En ambos tipos de Yoga es a través de la mente que conseguimos ser el Mago Blanco. El director, productor y actor de nuestra propia vida.
Indiferentemente de hacia donde dirijamos nuestros pasos una vez hayamos retomado y potenciado el control mental como elemento fundamental de evolución, los beneficios de ambos tipos de yoga son infinitos, siendo principalmente un motor hacia la libertad de ser uno mismo lo que puede permitirnos vivir una experiencia plena y satisfactoria de todas nuestras facultades y «dones» creativos.
Anabel.C.Huertas
ANABEL.C.HUERTAS 